EL PAR SE OPONE A LA REBAJA EN PRIMAS DE INSTALACIONES FOTOVOLTAICAS

El Portavoz de Grupo Parlamentario del PAR, Javier Allué, ha presentado una proposición no de ley en la que se posiciona contundentemene contra la posibilidad de que se establezcan rebajas con carácter retroactivo en las primas de instalaciones fotovoltaicas acogidas a los Reales Decretos 661/2007 y 1578/2008, debido a los graves problemas socioeconómicos que tal circunstancia podría provocar en varias comarcas aragonesas, así como a la pésima imagen de inseguridad jurídica que la adopción de tales medidas podría ofrecer en los mercados nacional e internacionales.

Tal y como se explica en la exposición de motivos de esta iniciativa, "...en los últimos tiempos se han producido algunas declaraciones públicas desde el Ministerio de Industria que apuntan a la elaboración de un nuevo modelo para el sistema eléctrico tendente a reducir el déficit tarifario sin elevar el coste de la energía para los consumidores en la medida de lo posible.

Algunas de estas propuestas pasan por la rebaja de las primas aprobadas para instalaciones fotovoltaicas en funcionamiento, lo cual supondría en la práctica la aplicación de una norma que desfavorece los intereses de muchos ciudadanos con carácter retroactivo. Las rebajas de las que se viene hablando en este sector alcanzarían el 30%. Con ello se pone en peligro numerosas inversiones realizadas en el sector de personas que se acogieron en su día al Real Decreto 661/2007 y al actual Decreto 1578/2008. Todo ello resulta más agravado si cabe en los actuales períodos de crisis económica, dejando a los inversores y emprendedores en situaciones muy delicadas frente a las deudas contraídas y pendientes de amortizar teniendo en cuenta los recursos que se les había asegurado a través de la normativa antedicha.

Hay que añadir que en el caso de la Comunidad Autónoma de Aragón, muchas de las instalaciones son pequeñas, y que corresponden no a grandes inversiones, sino a pequeños de carácter local, incluso familiar, y por tanto ligados al propio territorio.

Además del daño concreto al sector interno, es muy preocupante la imagen de inseguridad jurídica que esta modificación puede ocasionar en la imagen de las renovables en el exterior. Efectivamente, cambios tan radicales a penas dos o tres años después de la aprobación del marco normativo no suponen ningún estímulo para la inversión extranjera, al contrario. La falta de estabilidad normativa en la política energética supone la huida de inversores nacionales y extranjeros..."