MARÍA HERRERO (PAR) PRESENTA UNA INICIATIVA SOBRE LA AUTOVÍA TERUEL-CUENCA

La Diputada del Grupo Parlamentario del PAR en las Cortes de Aragón, la calandina María Herrero (en la imagen junto al Senador José María Mur y el Portavoz del PAR en las Cortes de Aragón, Javier Allué) ha presentado una proposición no de ley que pretende que el Gobierno central de marcha atrás en su decisión de suspender el proyecto del tramo de la autovía Cuenca-Teruel A-40.

Para la impulsora de la iniciativa, la diputada turolense, María Herrero “es intolerable que Teruel sea la única capital de provincia que no tiene conexión directa con Madrid y que se siga negando esta posibilidad sin proponer alternativas. La razón de fondo de desechar esta autovía no es el impacto medioambiental sino la falta de voluntad política del Estado para invertir en Teruel. La negativa tajante y sin dejar puertas abiertas para la A-40 nos parece inaceptable ya que se ha estado jugando con los sentimientos de los turolenses despertando expectativas que, una vez más, se truncan de un plumazo”. Herrero ha manifestado que “para llegar a este punto no son necesarios 5 años”; la redacción del proyecto de trazado del estudio informativo, ha dicho, es la causa de estas consecuencias, pero podrían haberlo modificado. Por eso, el PAR, en su proposición no de ley, insta al Gobierno de Aragón a que se dirija al Gobierno central y le solicite que no deseche la conexión por autovía entre Teruel y Cuenca y que estudie con agilidad y compromiso firme alternativas medioambientalmente viables que permitan que Teruel pueda estar comunicada con Madrid por autovía en el menor tiempo posible “una cuestión esencial para el desarrollo socioeconómico de esta provincia”.

Además, Herrero le solicita en la propuesta que actúe efectiva y rápidamente en la carretera nacional que actualmente une Teruel con Cuenca, especialmente en el tramo entre la capital turolense y el límite de provincia “por tratarse de una vía en una situación lamentable y siendo, a día de hoy, la única conexión entre ambas capitales”.

 

En la exposición de motivos la diputada, María Herrero, recuerda que la provincia de Teruel ha vivido en los últimos años una evolución muy positiva en muchos aspectos, fruto de la sensibilidad del Gobierno de Aragón y de los partidos políticos aragoneses con la misma impulsando proyectos importantes, invirtiendo en sus municipios y actuando en todos los ámbitos en los que la Comunidad Autónoma es competente. Pero Teruel, ha dicho Herrero “sufre todavía los efectos de un déficit histórico de inversiones del Estado, especialmente patente en infraestructuras de comunicación. La recién estrenada A-23, pese al largo tiempo y demora que ha costado su ejecución, ha sido sin duda un importante logro para la sociedad turolense. Pero la puesta en marcha de esta vía no puede suponer un parón en el resto de infraestructuras carreteras y ferroviarias esenciales para la conexión y vertebración de la provincia. Entre otras, la A-40 en su tramo Cuenca-Teruel es una autovía fundamental para el desarrollo socieconómico de Teruel, conectando así una zona desfavorecida en materia de comunicaciones del interior de España con la capital, Madrid”.

 

Por último, el PAR recuerda que en el Plan Específico de Actuación para Teruel (PAET), aprobado en 2005 se decía “se encuentra pendiente de la Declaración de Impacto Ambiental, en 2006 se licitará la redacción de los correspondientes proyectos para lo que se destinará una partida de 2,3 millones de euros en PGE 2006. La autovía, incluyendo las provincias de Teruel y Cuenca, supondrá una inversión de 520 millones de euros, de los cuales 115 corresponden a Teruel”. En el PEIT (2005-2020) se recoge la autovía entre Teruel y Cuenca (ya se incluyó en el Plan de Infraestructuras y Transporte anterior 2000-2007). Desde el año 2003 está pendiente la elaboración de la Declaración de Impacto Ambiental, paso previo a la aprobación del Estudio Informativo. “La reciente noticia de que la DIA es desfavorable al trazado propuesto en el Estudio Informativo nos preocupa enormemente” ha dicho la diputada “actualmente la conexión entre Teruel y Cuenca se realiza a través de la N-330 (o N-420); la carretera entre Teruel y el límite de provincia es una carretera nacional en una situación deplorable. La anchura de la vía, la inexistencia de arcenes, el trazado de curvas y la orografía por la que transcurre esta carretera es de todo punto inaceptable, teniendo en cuenta, además, el elevado tráfico de vehículos pesados y el paso por numerosas localidades, lo que provoca que se produzcan numerosos accidentes”.

 

Desde 1997 está aprobado el proyecto técnico de la N-330 para su acondicionamiento; proyecto que no se ha llegado a ejecutar a pesar de haber contado con varias consignaciones presupuestarias a lo largo de esta década.