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COMENTARIOS SOBRE LA ACTUALIDAD DE ARAGON

LAS COMPETENCIAS DE ARAGÓN, NI TOCARLAS

LAS COMPETENCIAS DE ARAGÓN, NI TOCARLAS

Os adjunto artículo de opinión de Javier Allué (Portavoz del Grupo Parlamentario del Partido Aragonés en las Cortes de Aragón) sobre las competencias de Aragón y el desarrollo de nuestro Estatuto de Autonomía, publicado el pasado día 28 de enero en el Periódico de Aragón. En el mismo se realiza un análisis de la situación actual sobre el Estado de las Autonomías, la posible involución planteada desde los partidos centralistas y su afección en Aragón.

"En los últimos días estamos asistiendo a un agitado debate territorial provocado intencionadamente por un Partido Popular que ha vislumbrado un filón importante en el cuestionamiento del estado de las autonomías, utilizando partidistamente la vorágine de la crisis económica a cuatro meses de la toma de contacto con las urnas.  

Las intenciones de Aznar de devolver al Estado competencias autonómicas carecen de sentido. Son una auténtica barbaridad que retrata su propósito de negar el derecho a la autonomía reconocido en el artículo 2 de la Constitución. Me parece lamentable que Aznar y Egibar coincidan en que las autonomías son las responsables de la crisis; al modelo autonómico se le debe exigir austeridad y eficiencia en la gestión de los asuntos públicos por higiene democrática, pero demonizarlo y amenazar con la recentralización solo sirve para arreciar la confrontación e intoxicar a la opinión pública. En un momento económico delicado y rozando las autonómicas y municipales, el debate territorial no debería convertirse en reclamo de partidos para captar el voto. Sin embargo, servida está la agitación social y política en una controversia viciada por los tiempos electorales y la acusada crisis financiera.

 

Es necesario recordar que el actual estado de las autonomías está consagrado por la Constitución española de 1978 y que llevamos treinta años de descentralización que ha permitido el crecimiento y prosperidad de las Comunidades Autónomas. Entiendo que cuestionar las autonomías es cuestionar el estado del bienestar y rechazo cualquier movimiento involucionista que afecte directamente a los derechos de los ciudadanos teniendo en cuenta que los principales servicios públicos son prestados por las mismas.

A pesar de las últimas declaraciones de Zapatero, un posible pacto PSOE-PP  podría suponer un movimiento de involución autonomista quebrantando los amplios consensos históricos plasmados en el título VIII de la Constitución y en las distintas leyes orgánicas que conforman los Estatutos. Y eso sería muy grave, incluso letal para Comunidades que como Aragón carecen de fuerza política en las Cortes Generales. Así las cosas, me preocupa el acontecer futuro de un debate que ya fue objeto de amplio consenso constitucional en su día.

Tengo el pleno convencimiento de que el camino para permitir mejorar la gestión y el ahorro de la Administración central y de todas las administraciones, es la racionalización del gasto y en Aragón lo sabemos; el PAR ya ha presentado sus propuestas.

He de recordar, también, que las Comunidades Autónomas acumulan dispares niveles de deuda; el tripartito dejó casi 7.800 millones de déficit en 2010 (dato que hemos conocido tras las catalanas) y el Ayuntamiento de Madrid y la Generalitat valenciana se encuentran en la misma situación; no así Aragón.

Mientras, Durán i Lleida vocea de manera igualmente interesada y desleal que “el café para todos fue un error” dando sin pudor alguno una soberana bofetada a los principios democráticos. En ese sentido, situándonos en el 23 de mayo, me intranquiliza que Cataluña y País Vasco, que cuentan con importante peso específico en el Estado, vuelvan a reabrir el debate sobre Comunidades de primera y de segunda. Por eso es importante que los aragoneses estemos avisados, actuemos en consecuencia y mantengamos la reclamación de más competencias defendiendo con uñas y dientes las que tenemos. Ahí ha estado, está y estará el PAR. Es un hecho constatable que cuanto menos dependemos de Madrid mejor le va a Aragón y cuanto más dependemos de Madrid, peor nos va. Ese es el dato."

 

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