EL PAR APOYA LA MEJORA DEL EJE FRANCÉS PAU-OLORON-SOMPORT
El Diputado altoaragonés Antonio Ruspira, ha presentado esta mañana en Huesca, una proposición no de ley relativa al apoyo a los colectivos sociales franceses que reclaman mejorar el tramo Pau-Oloron-Somport. En la exposición de dicha iniciativa parlamentaria, Ruspira ha explicaso que la permeabilidad de los Pirineos por su zona central a través de vías de comunicación que hagan posible el transporte de viajeros y mercancías desde Aragón hacia Europa y viceversa, no sólo es una larga reivindicación para esta Comunidad, sino también una conditio sine qua non para nuestro desarrollo socioeconómico así como para rentabilizar la actual apuesta pública y privada aragonesa por la logística. Es pues, a entender del Diputado del PAR, una cuestión de interés europeo y de Estado para España, ante la saturación de los actuales pasos a ambos extremos de la cordillera que pueden provocar su colapso en breve plazo.
La apertura del túnel por carretera de Somport en el año 2003, fue valorada en su día como un auténtico hito para el trazado del señalado eje Burdeos-Pau-Huesca-Zaragoza-Teruel-Levante, que incluso podría hacer surgir también nuevos enlaces París-Madrid y Toulouse-Zaragoza-Madrid. Sin embargo, tres años después, sólo cabe constatar que su impacto socioeconómico es muy escaso, ya que no ha generado unos flujos de tráfico relevantes. Ello se debe, según Ruspira, a que mientras en la vertiente española se han producido sucesivas mejoras de los accesos a ese túnel, el acondicionamiento de las carreteras galas que convergen en el mismo no goza del mismo nivel de mantenimiento y mejoras (incluidos cientos de kilómetros de autovía, la carretera RN-134 en el tramo Pau-Oloron-Somport presenta un trazado decimonónico y un estado deficiente en su recorrido por el valle de Aspe donde se suceden los problemas, una travesía de Oloron complicada, y una congestión entre esta localidad y Pau, y la conexión con Burdeos está pendiente de resolver todavía por la ruta más directa programada). La mejora de esos noventa kilómetros disuasorios entre Somport y Pau supondría favorecer la seguridad, los tiempos de viaje y los consumos, si bien las perspectivas no son favorables, ya que los diversos proyectos de variantes de población y adecuación prolongan sus plazos sin que se afronte una renovación integral, pese a los reiterados compromisos expresados.
Entre las entidades e instituciones del Sur de Francia se defiende, cada vez con mayor rotundidad, puntos de vista similares a los aragoneses en cuanto al "cuello de botella" de la RN-134 y la reclamación ante su administración central es permanente. En fechas recientes, al hilo de esta posición, ha sido formulada una propuesta viable y cuya trascendencia podría ser definitiva frente al "estrangulamiento" que se produce en la vertiente francesa de Somport.
Francia va a afrontar la construcción de la autovía A-65 Pau-Mont de Marsan-Langon, en las inmediaciones de Burdeos, con una programación de entrada en servicio para el año 2010, completando el tramo más al Norte del eje antes descrito. Serán 150 kilómetros nuevos y todos los trámites están realizados, en particular los referidos al sistema de financiación para esa autovía cuyo coste total está calculado en mil millones de euros. Esta financiación se preveía de carácter mixto, ya que se había realizado una concesión por el 50 por ciento de ese presupuesto que iba a ser asumido por un grupo de empresas constructoras . El resto debía ser aportado por fondos públicos, del Estado francés, de la región de Aquitania y de los consejos generales de los departamentos implicados. Sin embargo, las empresas concesionarias han decidido, a la vista de sus cálculos económicos, asumir el 100 por 100 del coste de esa obra, que recuperarán con un peaje a largo plazo entre Pau y Burdeos. Por lo tanto, las administraciones públicas francesas han visto liberados 500 millones de euros consignados y plurianualizados para esa futura autovía.
La sociedad civil de esa zona del país vecino, a través de diversas entidades reconocidas como la Cámara de Comercio de Pau o la Asociación BAP (Bearn-Adour-Pyrenees) se han dirigido al Gobierno francés planteando que ese montante multimillonario, comprometido para infraestructuras de esa región, se destine precisamente a mejorar esos casi 90 kilómetros entre Pau y el Somport con un horizonte temporal de apertura similar al de la A-65, es decir, en 2010. La importancia de esa petición es innegable también para Aragón y España, ya que puede suponer el desbloqueo de un proceso muy lento de mejora de esos tramos, de manera que con una perspectiva a medio plazo se completaría el eje Burdeos-Sagunto, mucho antes de lo augurable hoy, y se presentarían nuevas opciones para otro eje que ha sido formalmente propuesto entre Somport-Pau-Tarbes-Limoges-París.
Las instituciones aragonesas y el gobierno español no pueden permanecer pasivos ante esta novedad en una cuestión prioritaria y de Estado, y deben aprovechar cada oportunidad para respaldar la demanda de las entidades del Sur de Francia. Por todo ello, Antonio Ruspira ha presentado esta iniciativa parlamentaria ante las Cortes de Aragón, para que se dirija al Gobierno de Aragón con objeto de que éste inste a su vez del Gobierno central, las gestiones necesarias ante las autoridades francesas a fin de apoyar el planteamiento formulado por entidades del Sur de Francia, para que sea consignado el liberado presupuesto público previsto en la autovía Pau-Langon a los diferentes proyectos de acondicionamiento integral de los tramos Pau-Oloron-Somport, o en su defecto, ante un resultado negativo de dicha propuesta, proponga como alternativa en las próximas cumbres o reuniones bilaterales el estudio del sistema de concesión con "peaje en sombra", al objeto de que se afronte la mejora inmediata del tramo Oloron-túnel de Somport de la RN-134 y eje europeo E-07, imprescindible para la solvencia de dicho eje y la apertura del Pirineo central.
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