OFRENDA DE FLORES
La ofrenda de flores a la Virgen del Pilar de este año (2008) ha estado pasada por agua. Como todos los años, mi familia y yo nos hemos vestido con nuestros trajes, y hemos acudido a la entrada de participantes individuales. La espera ha durado más o menos como todos los años (unas dos horas y media de cola), aunque las amenazantes nubes han contribuido a que más de uno este año no participara, y por ello todo ha sido un poco más fluido.
Como os digo, el cielo amenazaba lluvia...y vaya que ha llovido. En la espera a lo largo de la calle de San vicente Paúl de Zaragoza, ha comenzado un chubasco con bastante fuerza, que ha provocado que todos sacáramos nuestros paraguas y nos refugiáramos donde podíamos (debajo de los árboles, de balcones, en patios, etc) todo ello sin perder nuestro puesto en la cola. Después ha parado de llover, pero el cielo ha seguido encapotado. Finalmente al cabo de quince minutos ha vuelto a descargar fuerte.
La ofrenda se ha deslucido bastante por la lluvia (había bromas sobre el efecto de la Expo del agua), y todos hemos salido con las alpargatas de cáñamo chipiadas de agua, las medias mojadas, etc. Las chicas tenían que recogerse con la mano las faldas y las enaguas para que no se estropearan...Pero en fin, también ha sido bonito.
Por delante nuestro había un grupo de mexicanos que ha animado bastante la espera. Y finalmente hemos entrado a la plaza del Pilar. La Cruz de Lorena ya estaba puesta en el Virgen. Los grupos de baile y cante de jota se turnaban en el escenario, brindando sus mejores repertorios. Y de repente...brrrooummm!! Un trueno enorme, y otra vez a llover (a diluviar, diría yo), y todos calados hasta la huesos.
Lo importante es que un año hemos cumplido nuestro compromiso. Os adjunto una foto de familia con el Puente de Piedra al fondo (allí salgo con mi super-sombrero de ala ancha).
0 comentarios